Estados Unidos revoca visa al cantante de narcocorridos Javier Rosas

Ciudad de México, 2 de junio de 2025 — El cantante sinaloense Javier Rosas, conocido por su trabajo dentro del género de narcocorridos, anunció la cancelación de sus próximos conciertos en Estados Unidos luego de que las autoridades de ese país revocaran su visa de trabajo. Las presentaciones afectadas estaban programadas para el 1 de junio en Toppenish, Washington, y el 6 de junio en Minnesota.
A través de un comunicado en redes sociales, el intérprete aseguró que la decisión fue totalmente ajena a su equipo de trabajo y se debió a “temas administrativos”, sin que exista, según él, relación alguna con asuntos legales. «Estoy en la necesidad de suspender temporalmente mis actividades en Estados Unidos debido a la cancelación de mi visa de trabajo», escribió Rosas en el mensaje difundido a sus seguidores.
El caso de Rosas se suma a una tendencia reciente: varios artistas del regional mexicano han sido objeto de restricciones migratorias en Estados Unidos. Ejemplos destacados incluyen a Grupo Firme, quienes también cancelaron conciertos por problemas similares, y a Julión Álvarez, a quien se le revocó la visa por segunda ocasión. Estas decisiones han generado un debate sobre los límites entre la expresión artística y los criterios de admisión migratoria.
Algunas agrupaciones, como Los Alegres del Barranco, enfrentaron consecuencias tras proyectar en sus conciertos imágenes de figuras vinculadas al narcotráfico, lo que ha elevado la sensibilidad del gobierno estadounidense ante los mensajes asociados a este tipo de música. Las autoridades han intensificado la revisión de antecedentes y contenidos de artistas cuya obra puede considerarse como apología del crimen organizado.
Este tipo de restricciones ha encendido alertas en la industria del entretenimiento, pues afectan directamente a artistas, promotores y audiencias. A medida que se endurecen las políticas migratorias en Estados Unidos, la comunidad artística enfrenta nuevas barreras para llevar su música al público internacional, mientras continúa la discusión sobre el papel de la música en la construcción de discursos sociales.