Enrique Vázquez Reyna, delegado de la Fiscalía General de la República (FGR) en Tamaulipas, fue asesinado el lunes 5 de agosto en Reynosa, tras ser víctima de un ataque armado mientras circulaba en una camioneta oficial acompañado de sus escoltas. El atentado incluyó disparos de alto calibre y una granada lanzada desde un vehículo, lo que provocó la muerte inmediata del funcionario y de uno de sus acompañantes.
Vázquez Reyna, quien había sido nombrado en el cargo en 2022, era conocido por su participación activa en investigaciones sensibles, particularmente relacionadas con el robo de hidrocarburos, también conocido como huachicol. Su labor en la entidad había sido reconocida por su firmeza, lo que lo convirtió en blanco de amenazas provenientes del crimen organizado.
El ataque ocurrió en una zona urbana de Reynosa. La camioneta blindada en la que viajaban fue interceptada por sujetos fuertemente armados, quienes dispararon en repetidas ocasiones y lanzaron una granada. El vehículo fue consumido por el fuego, mientras las autoridades locales y federales se movilizaban para asegurar la zona e iniciar las investigaciones.
La Fiscalía General de la República lamentó el asesinato y aseguró que se investigará a fondo el crimen, el cual ha sido interpretado como una represalia directa por las indagatorias que lideraba el delegado. La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, también expresó su condena y pidió justicia inmediata. La violencia del atentado ha generado conmoción dentro y fuera del estado.
Diversos colectivos civiles, organizaciones de derechos humanos y figuras políticas exigieron garantías para los funcionarios públicos que enfrentan al crimen organizado. La muerte de Enrique Vázquez Reyna representa una grave pérdida institucional y subraya la persistente vulnerabilidad del Estado ante los embates de grupos delictivos.
